Más allá de las respetables y firmes creencias religiosas, de la liturgia eclesiástica, esta semana conocida como la “Semana Mayor” se caracteriza por una enorme movilidad turística de cientos de miles de personas, quienes toman un breve descanso en playas exóticas, montañas espectaculares, sitios arqueológicos y todo tipo de atractivos para el descanso espiritual y físico.
acapulco Se consagró como el lugar mágico cuyo atractivo clima, cálidas playas y ubicación geográfica lo convertían en el ícono turístico más atractivo de México.
Su desarrollo se inició en la década de 1940 y se construyó de manera desordenada y acelerada una gran infraestructura que se inició en las playas de Caleta, Caletilla y la Quebradaconvirtiéndose este último en la atracción simbólica donde los buzos, desafiando a la muerte, realizan hasta el día de hoy los clavados más espectaculares, los cuales se ven desde el antiguo cabaret La Perla del famoso hotel El Mirador, que junto con el Hotel Flamingos Fueron el refugio del mitológico Tarzán que interpretó a Johnny Weissmüller.
Allí llegaron los personajes más famosos de la época: Rita Hayworth, Frank Sinatra, John F. Kennedy, Ronald Reagan y muchos más. El presidente Miguel Alemán le dio el primer gran impulso, construyó la playa que lleva su nombre y se construyeron el Hotel Caleta, el Majestic, el Papagayo, Las Hamacas y muchos más.
En el gobierno de Gustavo Díaz Ordaz, la inteligencia creativa de Mario Moya Palencia organizó el festival de cine más importante de la época; Echeverría creó el fideicomiso Acapulco y Cumbres de Llano Largo. En la otra parte de Acapulco, se inauguraron el Hotel Las Brisas de Carlos Trouyet, los edificios Torre Blanca construidos por ICA y los últimos hoteles importantes del puerto, el Hyatt International y el Acapulco Princess, a los que se sumó el Pierre Marques.
Proliferaron las discotecas y restaurantes como Armando’s Le Club, Boccaccio, Tiberios y otros. El primer club nocturno del país fue el Tequila a Go Gó con jaulas con chicas bailando en el escenario, promovido por el señor empresario acapulqueño, Ernst Heinrich “Teddy” Stauffer.
El ingreso de divisas más importante del país se dio en este maravilloso lugar, que ha tenido la pluralidad de recibir a personas de todas las clases sociales y de todas las edades. Acapulco era el paraíso para todos.
Si bien es cierto que el desarrollo hotelero se ha detenido, los últimos 30 años han permitido la inversión en condominios, la más espectacular e importante de la historia contemporánea. A ello contribuyó la Autopista del Sol, que, con muchas deficiencias y muy costosa, fue otra palanca de desarrollo llevada a cabo en el gobierno de Carlos Salinas de Gortari.
Han pasado los años y se ha perdido el paraíso, la delincuencia y el narcotráfico, y sobre todo la extorsión, han sido los puntos negros de este maravilloso lugar. El imperio criminal se ha expandido y han proliferado los homicidios y los secuestros.
Sin embargo, es el momento de renovar este extraordinario Puerto, dotándolo de la seguridad que hoy le falta. A pesar de todo, en estos días de asueto, Acapulco sigue siendo el paraíso.
POR ALFREDO RIOS CAMARENA
PROFESOR DE LA FACULTAD DE DERECHO DE LA UNAM
PRESIDENTE DEL FRENTE UNIVERSITARIO LATINOAMERICANO (1958-1962)
VICEPRESIDENTE DE LA SOCIEDAD MEXICANA DE GEOGRAFÍA Y ESTADÍSTICA
MAÍZ
Esta nota es parte de la red de Wepolis y fué publicada por Corresponsal Mexico el 2023-04-08 22:38:39 en:
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