No hace mucho tiempo, había muchas razones convincentes para gastar más de $900 en un teléfono inteligente. Hoy en día, tendrás que encontrar una excusa para pagar tanto.

Me he quedado sin razones para derrochar y dejé de comprar teléfonos más elegantes con el apodo “Pro” en los últimos dos años. Eso no es solo porque soy frugal. Los teléfonos más baratos se han vuelto cada vez más indistinguibles de los de gama alta, y las pocas características que los distinguen rara vez valen el costo adicional.

El nuevo teléfono económico de Google que llega a las tiendas esta semana, el Pixel 7A, es el último testimonio de la madurez del mercado de teléfonos inteligentes y presenta una oportunidad para ahorrar dinero. El teléfono de nivel de entrada, con un precio de $ 500, está en muchos aspectos a la par con su contraparte premium, el Pixel 7 Pro de $ 900. Y según mis pruebas de una semana, recomendaría el modelo económico para la mayoría de los usuarios de Android.

Ten paciencia conmigo mientras rompo la tradición de revisar las funciones del teléfono. Poner el valor del Pixel 7A en perspectiva requiere una lección sobre la historia de los teléfonos inteligentes.