Apodado “El Inmortal” o “El Maestro”, en su trayectoria en la Isla se destaca el campeonato de 1935/1936, donde fue líder de bateo con un promedio de 358. En Cuba, donde jugó durante los inviernos, tiró 120 juegos completos, de los cuales ganó 106.

Martín Dihigo también dejó su huella en la Liga Mexicana, en la que protagonizó el primer no-hit-no-run en la historia de esta liga, récord logrado con su equipo, las Águilas de Veracruz, en 1937.

El cubano es considerado uno de los jugadores más completos en la historia de este deporte, ya que supo jugar con éxito las nueve posiciones de la pelota. Está consagrado en los salones de la fama de Cuba, Estados Unidos, México, República Dominicana y Venezuela.

El videojuego MLB The Show 23, lanzado el pasado mes de marzo, incluía a Dihigo entre sus personajes. En el modo “Storylines”, el videojuego rinde homenaje a las Ligas Negras y algunos de sus mejores jugadores. En este sentido, cuenta la historia de cada uno de estos jugadores a través de una introducción en video de estilo documental, seguida de un gameplay, que refleja momentos relevantes en la carrera de cada jugador.

Martín Dihigo comenzó a jugar béisbol a los 13 años en campeonatos juveniles y a los 17 ya jugaba béisbol profesional, donde debutó como infielder en la temporada 1922-1923.

El 15 de noviembre de 1928 conectó cuatro dobles en un mismo juego, algo inédito en la época. En el campeonato cubano de 1935/1936 fue líder en bateo con 358 de promedio y se destacó como lanzador con 11 triunfos y sólo dos derrotas. En Cuba lanzó 120 juegos completos y de esos ganó 106.

Ingresó a las Ligas Negras en 1923, como primera base de las Estrellas de Cuba. En su primera temporada fue el líder de jonrones. En 1926 y 1927 bateó para promedios de 421 y 370 respectivamente.

En Estados Unidos también jugó con los Homestead Grays en 1928; Gigantes de Filadelfia Hilldale de 1929 a 1931; y los New York Cubans, de los que luego también fue mánager.

Apodado “El Maestro” y “El Inmortal”, participó en varios Juegos de Estrellas entre jugadores afroamericanos y compartió el terreno con otros grandes del béisbol como James “Cool Papa” Bell, Satchel Paige y Joshua Gibson.

Fue el primer cubano en ser incluido en el Salón de la Fama de las Ligas Negras. También está en el Salón de la Fama del Béisbol de Cuba, México, Venezuela y República Dominicana.

El pico de su carrera fueron los años en la Liga Mexicana. En 1937, lanzando para su equipo, Águilas de Veracruz, produjo el primer no-hit-no-run en la historia de esta liga.

En 1938 terminó como líder de bateo con un promedio de .387 y líder de bateo con 18 juegos ganados y solo dos perdidos.

Durante su carrera demostró que podía jugar con éxito las 9 posiciones del béisbol, por lo que ha sido considerado por muchos como uno de los peloteros más completos en la historia de este deporte.

Martín Dihigo murió en Cienfuegos, Cuba, el 20 de mayo de 1971, a la edad de 65 años.

Opiniones

“Dihigo ha sido el jugador más completo que he visto. Podía correr, batear, lanzar, pensar, lanzar y liderar…”. (Buck Leonard, otro de los afrodescendientes en el Salón de la Fama de las Grandes Ligas de Béisbol)

«Dihigo tenía mejor brazo que Roberto Clemente». (Ted Page, veterano de las Ligas Negras)

“Dihigo fue el jugador más polivalente que vi. Una superestrella en cualquier posición que jugara, algo así como un Oscar Charleston en el jardín central, una Judy Johnson en la tercera base, un Buck Leonard en la primera base o un Sam LLoyd en el campocorto…” (James “Cool Papa” Bell, jardinero central estadounidense en las Ligas Negras)

“Dihigo fue uno de los más grandes que vi. Era un tremendo bateador, tremendo poder, podía batear promedio, todo. Jugué contra él en Cuba, en México y en las Ligas Negras cuando estaba con los New York Cubans”. (Roy Campanella, jugador de las Ligas Negras entre 1937 y 1946)