NASHVILLE, Tennessee — Siete agentes de policía de Nashville han sido asignados a “asignaciones administrativas” en medio de una investigación sobre la divulgación no autorizada de algunos escritos del tirador que mató a seis personas, incluidos tres niños, en una escuela primaria privada en marzo, dijeron las autoridades el miércoles.

A principios de esta semana, un comentarista conservador publicó lo que dijo eran tres imágenes de los escritos de Audrey Hale del día del tiroteo del 27 de marzo.

La filtración alarmó a las autoridades locales, que pidieron una investigación sobre la situación, y consternó a las familias estrechamente relacionadas con el tiroteo en la escuela Covenant que se han opuesto a la publicación de los documentos durante meses.

Don Aaron, portavoz del Departamento de Policía Metropolitana de Nashville, dijo que los agentes fueron asignados a tareas administrativas para «proteger la integridad de la investigación activa y en progreso».

Los agentes, cuyos nombres no han sido revelados, todavía tienen «pleno poder policial» y las asignaciones son «absolutamente no punitivas», dijo Aaron.

Aaron se negó a revelar cómo fueron identificados los siete agentes, citando la investigación en curso, y añadió que los agentes “están disponibles para ayudar en la investigación en curso según sea necesario”.

Un portavoz del alcalde Freddie O’Connell, que pidió al departamento jurídico de la ciudad que dirigiera la investigación sobre la filtración, dijo que estaban «conscientes» del último acontecimiento, pero no hizo más comentarios.

Según documentos judiciales, el tirador dejó al menos 20 diarios, una nota de suicidio y una memoria. Sin embargo, hasta esta semana ninguno de los escritos había visto la luz debido a una batalla legal sobre si debían hacerse públicos o no.

La policía de Nashville inicialmente dijo que publicaría los documentos, pero sólo después de que se cerrara oficialmente una investigación, lo que podría haber llevado meses. En respuesta, los grupos que buscaban los documentos presentaron una demanda argumentando que, dado que el sospechoso estaba muerto, debían ser liberados de inmediato.

Esa demanda está en curso, y muchas de las familias dicen que la publicación de los documentos causaría más dolor y posiblemente provocaría imitadores.

Los tres niños muertos en el tiroteo fueron Evelyn Dieckhaus, Hallie Scruggs y William Kinney, todos de 9 años. Los tres adultos eran Katherine Koonce, de 60 años, directora de la escuela, el conserje Mike Hill, de 61 años, y la maestra sustituta Cynthia Peak, de 61 años.