Durante la reciente Conferencia Internacional sobre Circuitos de Estado Sólido celebrada en San Francisco, diferentes equipos de investigadores han presentado sus últimos avances en materia de la seguridad cibernética.

Tenemos algunos avances que tienen que ver con circuitos que se autodestruyen si el fabricante así lo desea, detectores de sondas para evitar que los ciberdelincuentes tomen el control físico de un dispositivo y muchos otros esquemas de seguridad.

Lo que ha llamado mucho la atención es lo que han presentado investigadores de la Universidad de Vermont, Han creado una especie de mecanismo de autodestrucción, que cuando se activa puede inutilizar cualquier hardware..

Este mecanismo utiliza características únicas en transistores individuales para crear un código que actúa como una huella digital única.

Si un sistema se ve comprometido, el voltaje de funcionamiento en los circuitos podría aumentar para crear electromigración.

Esta técnica podría resultar eficaz para evitar, por ejemplo, que los chips falsificados tengan cierta validez en el mercado. De hecho, los grandes fabricantes de procesadores podrían incluir esta técnica, y hacer que los chips se autodestruyan de una manera que los vuelva inútiles si han confirmado que son robados.

Por otro lado, un equipo de la Universidad de Columbia presentó un mecanismo capaz de detectar si se ha conectado una sonda a un circuito, ideal para defenderse de ataques en los que los ciberdelincuentes tienen acceso físico a un sistema.

Otro avance, de la Universidad de Austin, fue una forma de enmascarar señales que emanan de fuentes de energía y electromagnéticas.