En general, se considera que Abe no cumplió sus promesas de promover a las mujeres en la sociedad. En el análisis anual de la brecha de género del Foro Económico Mundial, Japón, que tiene la tercera economía más grande del mundo, ocupa el lugar 120 entre 156 países.

Las mujeres todavía luchan por ganar terreno en la política japonesa, particularmente a nivel nacional. Yuriko Koike, la gobernadora de Tokio, fundó un partido en 2017 en un intento de interrumpir las elecciones nacionales de ese año, pero Abe llevó a los demócratas liberales a la victoria, mientras que el partido de Koike solo obtuvo un apoyo tibio.

Otra mujer en la carrera por el liderazgo de los demócratas liberales, Seiko Noda, de 61 años, ha promovido explícitamente la igualdad de género, así como los derechos de las personas mayores y las personas con discapacidad. Pero apenas obtuvo suficientes firmas de los legisladores del partido para calificar como candidata.

Los liberales demócratas de extrema derecha han dominado durante una década, y los analistas dijeron que las mujeres en particular tenían que virar hacia la derecha para ascender en el partido. “Para compensar esta desventaja de ser mujer, hay que mostrar una lealtad excesiva a los conservadores”, dijo Mari Miura, profesora de ciencias políticas en la Universidad Sophia en Tokio. “Y eso significa que tienes que ser dura y antifeminista”.

Dejando a un lado el género, la Sra. Takaichi es una candidata de liderazgo inusual porque no proviene de una familia política prominente. Los principales contendientes, Taro Kono, de 58 años, y Fumio Kishida, de 64, son hijos y nietos de miembros del Parlamento. El abuelo de Abe también fue primer ministro.

La madre de la Sra. Takaichi era agente de policía en Nara y su padre trabajaba para una empresa de automóviles afiliada a Toyota. En sus memorias, la Sra. Takaichi escribió que había sido admitida en dos universidades privadas prominentes, Waseda y Keio, pero que sus padres querían ahorrar el dinero de la matrícula de su hermano menor.

En cambio, asistió a la Universidad de Kobe, una escuela estatal, donde tocaba la batería en una banda y montaba una motocicleta. Después de graduarse, pasó un año en los Estados Unidos, haciendo una pasantía con la entonces congresista Patricia Schroeder de Colorado, una demócrata.