Un nuevo estudio demuestra que cenar tarde es aún peor para la salud y el peso de lo que pensábamos

¿Sueles comer muy tarde? Si te preocupa tu alimentación y tu salud en general, es momento de cambiar tus hábitos.

Hace tiempo que se sabe que comer demasiado tarde engorda. Es decir, ganas más peso que si cenas a primera hora de la noche. Pero, ¿cuál es la diferencia entre cenar a las 10 o hacerlo a las 12?

Parece extraño que un mismo alimento engorde más o menos según el tiempo que lo consumamos. Numerosos estudios han demostrado que comer demasiado tarde conduce al aumento de peso. Incluso si comes exactamente lo mismo.

Esto se debe a que el ritmos cardiacos que sigue nuestro cuerpo, ajustándose a los ciclos diurnos y nocturnos en los que se divide las 24 horas del día, influyen en los mecanismos moleculares y psicológicos que nos hacen engordar más o menos.

Ya sabíamos, por tanto, que comer demasiado tarde es malo para la dieta. Pero, ¿cuál es la diferencia entre cenar a las 9 o a las 12 de la noche, por ejemplo? Así lo confirma un nuevo estudio realizado en Estados Unidos, que nos llega a través de IFL Science.

Comer demasiado tarde engorda

Durante 12 días, 16 personas fueron literalmente encerradas en un laboratorio. No dejaban de ver que hacían las mismas actividades todos los días, y que comían exactamente los mismos alimentos en los horarios indicados.

Durante 6 días cenaron 6 horas y 40 minutos antes de ir a dormir. Para otros 6, solo 2 horas y media antes de ir a dormir. En el laboratorio hicieron todo tipo de mediciones a nivel molecular.

Los investigadores encontraron que comer tarde aumento de la sensación de hambre al día siguiente, y eso a pesar de haber cenado cuatro horas después.

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También aumentó la proporción de hormonas del “hambre” en la sangrea pesar de seguir la misma dieta. Además, se encontró que menos calorías quemadas el día siguiente.

En los participantes que se sometieron a una biopsia de tejido graso, cenar muy tarde causado cambios moleculares promover el almacenamiento de grasa.

En resumen, todos estos cambios indican lo mismo: si se mantiene en el tiempo, comer tarde engorda, incluso consumiendo el mismo alimento. Los autores del estudio recomiendan cenar un mínimo de 4 horas antes de ir a dormir. Y si es posible, avance rápido a 6 horas y media antes. Algo casi imposible en España, donde es costumbre cenar muy tarde.